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Querida Pepi:
Tú, yo, nosotros, vosotros y ELLOS creen en tu inocencia. Ya
he perdido la cuenta de los años que llevas en Carboneras, quizás 30, quizás
40; y nadie jamás te ha levantado el pies del suelo. Sí que te han mandado a
callar, pero tú eres una mujer de los pies a la cabeza. Hace falta energía y
coraje político para aguantar todas las calamidades y mentiras que vierten sobre
tu persona, pero la VERDAD, esa que sólo ELLOS conocen y saben, te llevará eso
que lo mata todo, EL TIEMPO.
Te aseguro que pocos de ELLOS conocen quien fue GOYA, más
por un ejercicio de irresponsabilidad que por desconocimiento; porque si ejercieran el ejercicio de la RESPONSABILIDAD esas preciosas láminas de uno de
los pintores más grandes españoles nunca hubieran desaparecido; y no se
quedarían sentados en un despacho pensando que tú sabes su destino.
Tú, yo, nosotros, vosotros y ELLOS saben que eres una gran
superviviente. Y te confieso, te confesamos que estamos hartos de escuchar
determinadas frases que heredan del odio y de la inadversión de tu capacidad de
aguante.
Aunque hace tiempo que tiendan a desdramatizar, ELLOS saben
que su equipo está agotado. ELLOS saben que más de uno empieza a manifestarlo.
Extrañas paradojas de la vida, ELLOS todo lo que criticaban, lo han cometido
por partida doble. TÚ sola sabes lo que tienes que soportar todos los días,
pero ERES FUERTE y tienes tu conciencia bien tranquila como le has dicho a los
periodistas que tú no has he nada.
Tú, yo, nosotros, vosotros y ELLOS saben que tienes el
corazón y la cabeza más sanas que muchos han podido ver por Carboneras. Y te
consideras una carboneras de esas de las buenas que siempre desde diferentes
puestos que has ocupado te has encargado de cuidar y hacer un buen trabajo.
Tú, yo, nosotros, vosotros y ELLOS saben que has vivido horas y
horas muy buenas, y también algunas pésimas y negras, pero que el tiempo a cada
uno lo coloca en su sitio.
Tú, yo, nosotros, vosotros y ELLOS saben que el éxito, el poder,
el dinero para ti poco te importa, más allá de lo imprescindible para vivir con
dignidad, al lado de esos hijos, familia y amigos que tanto te quieren.
Tú, yo, nosotros, vosotros y ELLOS creen en tu inocencia, aunque el fango de la envidia, de la maledicencia y el desastre de las tensiones políticas que todos los días sobresaltan la política deje quejumbrosos, malhumorados, y ambiciosos de lo ajeno.
Tú, yo, nosotros, vosotros y ELLOS saben lo que es el sentido de
unas cuantas risas y unas palabras de cariño, pero muchos tienen miedo de
exponerlo en la red o en la calle.
Pero tú, yo, vosotros y ELLOS saben que no es VERDAD. Conocen
donde estar el Sr. Goya o por lo menos lo vieron algún día entre archivos y
champán.
Pepi, nosotros, creemos que la gente de bien, humilde y de buen
corazón nunca pierden. Ganan en la libertad de ser ellas mismas con tu estilo,
tu libertad de expresión y espíritu crítico. No, no te amilanes. Los malos,
nunca cesan y estamos satisfechos que pagas con buen gusto, injustamente, todo
el precio de querer a tus compañeros.
Piensa Pepi, que el día que todo se acabe, esa guerra de desastre
por la que te apuntan, un montón de personas pensarán, pensaremos que valió la
pena que caminásemos un rato por Carboneras. Sólo quiero eso. Casi nada. O
todo. Todos creen en tu INOCENCIA, aunque el precio sea tan alto para ELLOS que
lanzan cohetes al cielo para derribar todo lo que les hace sombra. Lástima Pepi
que te toque pasar esto, pero tú ya lo has dicho… la justicia lenta siempre se
sirve en frío.
