Así se las gasta Pascual: Buscando el IP y sin corregir el gran error de poner a Carboneras a la altura de los grandes innombrables

Y  nuestro amigo Pascual buscando el IP, y poniendo Islas Balearics, Mallorca.
¿Qué es el IP? La matrícula del ordenador. Pero no quien lo escribe y desde donde lo escriben.
El IP puede estar en cualquier lugar del mundo.

Pascual es bonito como ver que te preocupas más de quien es ME DUELE EL CORAZÓN CARBONERO, que de ir como un valiente y levantar la mano en el Ayuntamiento lo que dices en privado que no te gusta.

Pascual es más bonito, querer a Carboneras, que dejar que la aniquilen unos pocos por odio a un equipo socialista y a un hombre que mira que le teméis.
Cristóbal tuvo fallos, claro que sí, sino no sería un humano, como tú, pero nunca puso a Carboneras a disposición de un sicario, lo dejó al azar de proyectos inexistentes, ni hizo sonrojar a Carboneras delante de políticos de Administraciones.

Pascual es más bonito, corregir, pedir perdón que no encerrarse en tu propio juego.

Pascual es más bonito, saber que Carboneras es la más grande, y no hacerla pequeña en el mapa, como el  libro que quiere publicar Paco sobre la maldición de los alcaldes.

Pascual es más bonito, sacarla del anonimato por proyectos ilusionantes, no por campañas que hasta has dejado a tus amigos en la cuneta, como a Bea que la dejaste sin trabajo por... Tú ya sabrás Pascual.

Pascual es mejor no bloquear a todos tus amigos que consideras socialistas cuando ellos ni se han metido contigo, ni te insultan, ni comparten tu manera de hacer política.

Lo siento Pascual, me da lo mismo que digas quien soy, o quienes somos, porque ORGULLO CARBONERO y ME DUELE EL CORAZÓN CARBONERO cuenta y narra la realidad carbonera, de lo que se sienten orgullosos y de lo que no.

Tú tienes la palabra. Si haces las cosas bien, te aseguro que nadie podrá nunca reprocharte nada.
Y ya sabemos en Carboneras. Las amenazas para los débiles, quizás sea bonito Pascual, corregir poquito a poquito y no dedicarte a insultar y amenazar por privado.

Lástima Pascual, que me desilusiones tanto.

Hay hombres que luchan un día y son buenos. Hay otros que luchan un año y son mejores. Hay quienes luchan muchos años, y son muy buenos. Pero hay los que luchan toda la vida, esos son los imprescindibles. B. Bertolt Brecht