Nuestro alcalde se ha enfrentado esta semana a su primera protesta pública: pancartas que abogaban para que se queden los baretos que están en la playa de Los Barquicos en los campos de la petanca. Ya veremos como acaba el asunto pero de momento todo parece tener una solución diferente a la que deseaban los amigos de este deporte.
Mientras ante el río revuelto ganancia de pescadores. El líder de Ciudadanos. Agustín Canovás, muy activo en la redes, no tanto en la protesta política ante tanta incompetencia, se ofrece para que no puedan quitar el bar de la petanca. Ya veremos como soluciona el estratega Felipe el asunto, porque como lo haga tan nefasto como su conversación ante la delegada de Gobierno, que desconocía qué competencias tenía ni tan siquiera le trasladó los problemas que sufre el municipio... Lástima que no se dé cuenta la joya que tiene entre sus manos, que es un pueblo que están destrozando poquito a poquito, eso sí para fiestas y cortar la calle Sorbas... no sobra ni un esfuerzo. Ya se sabe que la temporada estival en Carboneras en corta, pero es impresentable que un alcalde permita lo que está haciendo con sus negocios familiares. Y encima se fuma un puro en público, ni se sonroja ante tanto descaro y tráfico de cariño e intereses político a sus familiares.
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