Con un alcalde en el candelero judicial, el próximo día 26 de abril, tendrá el primero de muchos juicios que están al caer, por negar información a la oposición, le podrían sancionar con tres de inhabilitación; el equipo de Gobierno sigue triturando los derechos de los ciudadanos. Propio de una manera de mandar de repúblicas bananeras, aquí mandan mis co... es, cada uno que lo complete como quiera, nuestro alcalde y su equipo cogieron la vara de mando para marginar a los que no piensan como ellos. Triste que no tengan en cuenta la gran deuda que tienen con las familias humildes y sencillas de corazón de Carboneras, de pescadores, fontaneros, electricistas... que no comulgan con sus maneras de destrozar la igualdad, la libertad o la solidaridad, pero que con responsabilidad lucharon por una democracia antes de que algunos de ellos hubieran nacido. El caso de la Joaquina "La Bolera" sólo es la punta del iceberg de muchos ejemplos de personas humildes que están padeciendo la irresponsabilidad de un equipo, no solo los concejales del GICAR sino los del PP que acatan al dictado lo que ordena un alcalde que manda a callar a las mujeres, que boicotea a los parados, que habla mal a sus funcionarios, que insulta con sus gestos a los ciudadanos, que no se parte la cara por todos, sin excepción, los carboneros, con los que menos tienen, los que más lo necesitan, sean de su casta o no, de su partido o no, de otro color de la piel... Los concejales del PP son tan benevolentes y tan sumisos a los que manda sus socios de Gobierno, Don Salvador y Don Felipe (monta tanto, tanto monta) que les costará a más de uno sonrojarse y meterse debajo de la mesa de los Plenos. Dicen que de los errores se aprende, pero este Clan que ahora habita en el salón de Plenos del Ayuntamiento de Carboneras, no sólo no rectifica, sino que sigue haciendo mal sus deberes, no recuerdan de donde vienen, y lo que es peor, no saben a donde van, tan sólo hacer daño por rencor y egoísmo, rescatando a sus familiares y olvidando al resto de los carboneros. Me imagino que nuestro alcalde, quizás piense en aquel dicho, para lo que me queda en el convento, me... Es la política del desconcierto, de la mentira, del atropello, del súbdito y del miedo. Con las ayudas que están dando a los recibos domésticos se pagan los favores políticos y ya son muchas familias humildes que se encuentran con el no por respuesta.