Salvador H. recuperó la voz. Llevaba casi desde el inicio de legislatura sin abrir la boca. Parecía con todos los respetos más un maniquí en su silla sin emoción ni palabras. Un grupo que obtuvo dos concejales como GICAR y que después de su abortada propuesta de moción de censura, su cabeza de lista decidió desaparecer por el fondo del discurso político. El otro día, por lo menos utilizó palabros. Por lo menos, jugó a los dardos y recordó lo que su amigo Felipe y él no supieron ni quisieron acabar. Cayeron en su propia fosa de errores porque una oposición aunque se dedique a criticar, siempre debe tener un espíritu de propuesta y más cuando ellos fueron los grandes protagonistas del desaguisado de la piscina.
Al líder de Carboneras Avanza se le notaba nervioso. No se esperaba la aparición estelar de Salvador H. el día que todos deberían estar listos con el bañador para celebrar la apertura de la piscina y ya de paso unir fuerzas para el futuro de Carboneras. Pero no. Salvador H. quizás al dictado de su folio, sin levantar ni la mirada, para no salirse del guión propuesto, dejó hasta sin bañador a Felipe C. y ya de paso que estaba lanzó duros argumentos contra el propuesto juez de paz. Está claro que los plenos toman a partir de ahora otros derroteros. Salvador H, entra que estaba en el banquillo de "vacaciones", y a ver cómo se las apaña Felipe C. para parar como el mejor portero tantos goles que está dispuesto a meterle y tantos kms que está dispuesto a correr en la oposición carbonera. El que se llevó el guiño fue Salvador A. que se desmarcó de algunas posiciones sin sentido del tándem de Carboneras Avanza-GICAR. Más valeriana y menos palabras abruptas para el 2021.