Estimado Felipe:
Te escribo, lo primero, para desearte que tanto tú como tu familia y amigos estéis bien. Ante la extremadamente grave situación que se nos viene encima, no está de más protegerse y seguir las obligaciones que nos ha dado el Gobierno. Frente a una crisis tal, cuyas consecuencias nadie es capaz de prever, debemos permanecer firmes en el propósito irrenunciable de luchar juntos contra la pandemia. Todos estamos sufriendo las consecuencias directas de esta pesadilla; este virus no entiende ni atiende a discrepancias ideológicas. Largo tiempo hemos estado perdidos y enfrascados en luchas de poder y debates ideológicos que, más que unir y acercarnos, nos han dejado abiertas graves heridas, han convertido nuestra sangre en hiel y lo peor, ha parecido endurecer nuestro espíritu y corazón a una mísera piedra sin vida, sin sentimientos, sin sangre ni carne. Bastante hemos respirado, a lo largo de muchos años, ese aire ponzoñoso del "y tú más", esa mezcla letal de lejía y amoniaco que a punto ha estado de matarnos. Si algo podemos hacer, Felipe, ante esta situación, es unirnos y trabajar juntos en superar lo que se nos viene encima. Y si de algo puede servir esto, sea en el día que sea que esto acabe, es para demostrarnos que frente a esta horrible realidad supimos dejar a un lado nuestras diferencias para trabajar por el bien común. Me consta que, mirando a todos aquellos que quieres, y teniendo la responsabilidad que no sólo tienes para con ellos sino para con el pueblo de Carboneras, podrás hacerlo. Yo te ruego y te animo a que lo hagas; nuestros niños de Carboneras juegan juntos y no entienden nada de esto, así que merecen que lo intentemos.
Felipe Cayuela, eres concejal del Ayuntamiento y, por tanto, parte de él. Y, en mayor o menor medida, tu familia y los trabajadores que tenéis o han pasado por ahí nos han dado de comer al menos una vez en nuestras vidas. Tienes toda mi solidaridad, apoyo y comprensión en estos momentos. Mi familia también posee un negocio de hostelería en Purchena que ha sufrido el mismo destino que todos. Vamos en el mismo barco, Felipe, recuérdalo.
He leído la noticia y no puedo por más que pensar en su sentido. Las conclusiones las sacaré cuando todo esto termine. Que haya una sola persona que en este pueblo no pueda comer es algo a lo que todos tenemos que hacer frente. No se puede permitir, Felipe, y como sociedad se han iniciado los mecanismos que tiene el Estado para responder. Sabes que se ha movilizado al Ejército para que éste lleve a cabo las labores asistenciales de todas las personas en situación de exclusión. Me consta que aquí en Carboneras eso no va a hacer falta al menos por ahora. Cáritas aquí en Carboneras está trabajando a destajo. Y también, ante una situación de este calibre, los vecinos y vecinas debemos apoyarnos. Si alguien no tiene para comer y necesita de nuestra ayuda, creo que entre todos tenemos la obligación moral de actuar. Entre tanto, el ayuntamiento de Carboneras, al que como concejal te repito que perteneces en pleno, ha facilitado información y teléfonos de asistencia para aquellos cuyas necesidades durante estos días no estén lo debidamente cubiertas. Teléfonos que paso a recordar aquí, ya que no los he visto ni en la noticia, ni en tu perfil ni en el perfil del partido al que representas. Que supongo la persona denunciante de los hechos estará a la espera de una solución, o al menos de alguien que le facilite un teléfono para conseguir ayuda.
Policía Local: 950 136 136 / 639 890 999
Protección Civil: 950 136 112 / 660 610 017
Ayuntamiento de Carboneras: 950 454 238 / 687 697 960
Así mismo, el Ayuntamiento de Carboneras y su Alcalde-Presidente ha facilitado el teléfono del centro de salud y ha indicado de qué manera se atenderán las visitas. Del mismo modo, Sofía Caparrós Crespo, a la que tanto vamos a tener que deber y a la que le mando un enorme abrazo de cariño y agradecimiento, está informando también a los vecinos. En este sentido, se han facilitado los teléfonos de Salud Responde y más relativos al COVID-19, así como los teléfonos del centro de salud, que son el 950 451 750, 950 451 742 y, para festivos y fines de seman el 950 451 760. Todas las veces que repitamos esta información será poca, Felipe, así que te animo a que lo hagas tantas veces como puedas y debas. Tú fuiste Alcalde, Felipe, y sabes de lo importante que resulta tener informados a los vecinos y vecinas. Te animo a que lo hagas, así como te animo a que lo hagáis de igual manera y expliquéis las medidas adoptadas por el RD 463/2020, por el cual se decreta el estado de alarma que, como sabrás, recientemente ha sido modificado y nos trae ciertas novedades. Tampoco he visto nada al respecto en tu perfil o en el del partido que representas, y no estaría de más hacerlo. Será un despiste, imagino, pues estoy seguro que quieres hacerlo porque sabes que, con ello, ayudarás a que todos juntos podemos vencer esta crisis, que no sería otra cosa que traer bien a nuestro pueblo, apagar las incertidumbres de la gente, traer consuelo a personas que lo están pasando mal, proteger y cuidar a las personas que queremos y amamos y, sobre todo, dotar de todo lo necesario a aquellos que hoy en día trabajan contra el virus y ayudan a que nada de lo necesario nos falte en casa.
Querido Felipe, se avecinan tiempos muy duros y difíciles. Sufriremos mucho, no me cabe la menor duda; ya hay gente sufriendo ahora mismo, y la dimensión de la tragedia debería hacernos tomar conciencia de las obligaciones que tenemos para con la sociedad, no ya solo en su observancia sino, y mucho más importante, vigilar su estricto cumplimiento en la medida que se nos piden esfuerzos individuales jamás antes vistos por la mayoría de nosotros. Quiero pensar que esta noticia ha sido una broma, pues no puedo tomarme en serio un artículo en prensa que no viene firmado por periodista o agencia de comunicación alguna; esto no es serio y podría arrojar leña a un fuego que ahora mismo no tenemos ni la menor idea de cómo vamos a apagar. Lo que ahora importa es que nos pongamos a trabajar juntos, vecino, para tratar de sacar esto adelante para que así, no nos perdamos en cuestiones accesorias y fatuas, innecesarias del todo ahora. Y apelo a tu responsabilidad y vocación de servicio público con todos los vecinos para que el conjunto de la sociedad no se vea envuelta, otra vez más, en una discusión estéril. Sinceramente, he visto zancadillas con mejor organización y ejecución que esto. Pero como te decía, lo achaco a una broma o a una pataleta infantil que, siendo magnánimos, olvidaremos. O quizás no. Lo que quisiera pedirte es que te unas en este titánico esfuerzo que estamos llevando a cabo. Hablo por mí y te ruego que lo hagas, porque harás mucho bien y, sobre todo, porque estás social y moralmente obligado a hacerlo.
Sin otro particular, Felipe, quisiera desearte ánimo y mis mejores deseos para ti y para toda tu familia. Cuidaros mucho, vigilad vuestra salud, protegeos contra el virus, salid lo menos posible de casa y haced bien. Recibe un cordial saludo y mis mejores deseos.
Atentamente,
Javier Cano.