domingo, 16 de julio de 2017

Sí señor, Alejandro, campeón del mundo, y Alba e Inés, quintas del mundo. Gracias Miguel, gracias, y mil gracias. Carboneras tendría que ser sede internacional de un torneo de balonmano playa. Por méritos no nos falta





Alejandro. Inés. Alba. Tres, y menudo trío de ases para pasar Carboneras por el mundo, Y hace nada ya lo hizo Ricardo Amérigo. Y lo hacen en la mano con una pelota que empezaron a tocar en la pista del Simón Fuentes, hoy derrumbada quizás más por rencillas, que por necesidad; y pisotear arena y hacer giros en la playa de los Cocones. Somos los grandes del Balonmano Playa, y menuda cantera está dando el deporte Carboneras y hoy representado por una generación que está dejando el listón muy alto para los que vienen detrás agitados por un grupo Carbo, que respira pasión por todos sus poros de la piel.
Impresionantes ver las imágenes, escuchar el himno de España y ver la cara de los carboneros. Quizás habría que ir pensando en pedir que Carboneras sea la sede de algún torneo internacional porque se lo merece.
Y el trabajo que empezó un desconocido Miguel París no sólo ha cosechado triunfos a nivel nacional, sino que el panorama internacional está dejando una gran huella.
Gracias carboneros por ser tan grandes. Alejandro, campeón del mundo. Las guerreras, Alba e Ines, quintas del planeta. ¿Alguién da más?