José Luis y la Niña Pastori: Échame una mano prima que viene mi novio a verme

Está claro que si José Luis no gana por mayoría absoluta, siempre le costará llegar a gobernar. Sobre todo porque enfrente tiene a partidos viscerales que han demostrado que por encima de los intereses de Carboneras están sus intereses. No lo digo yo, lo dicen las facturas que han salido a la luz, que no son las que se ven. La toma de conciencia política de la juventud a través del desafío de sacar a Carboneras del atolladero en el que un GICAR de GENTE POR INTERES LEJOS DE CARBONERAS lo han sumido y PP, POR MI EL PRIMERO.

Está claro que estos últimos 8 años, no han servido para nada en Carboneras. El PSOE más o menos acertado dejó unos proyectos de los que han vivido unos inquilinos en el Ayuntamiento lleno de virucuetos y sometido a toda clase de vaivenes. Primero Salvador y ahora Felipe (bueno este tiene totalmente paralizado el Ayuntamiento) han conducido con las luces cortas que han llevado al pueblo a sonrojar. Menos mal que para fiestas nos alegran y nos traen a la Niña Pastori (que hará bailar a todos los alrededores y a nuestros paisanos que seguro que acudirán a Carboneras a escuchar a esta gran mujer).

José Luis y sus compañeros tendrán que luchar a tope y convencer si quieren llegar a un Ayuntamiento del que sólo los carboneros desean que se contemple un horizonte en el que van a vivir nuestros descendientes y se realice con compromiso firme y efectivo de garantizar el derecho de vivir de las generaciones futuras.

Ya se verá quien se lleva el gato al agua, pero lo que está claro que poca credibilidad tienen los que han estado porque no han hecho nada de lo que prometieron y no han dado ni un giro a lo que tanto criticaron sino al revés, suspendieron y no por los pelos.

Ojalá que las listas de los partidos, los acompañantes pongan la vida, el bienestar de las personas y de nuestro pueblo en el centro, porque lo visto en los cuatro últimos años ha sido: como van de mejoría peor cada día. Niña Pastori con su poderío y bajo sus alas detesta ser de las que se copian y se repiten.

"En el flamenco es donde menos machismo hay", aseguró en una entrevista la gaditana que considera que ese género da "más protagonismo" a la mujer que cualquier otro y es tan "amplio" que en su universo caben otros estilos, a los que ella siempre estará abierta: "En la música no hay puertas ni ventanas".

"Quedan el espíritu y la ilusión por seguir aprendiendo", recalca Pastori, que cree que "el destino está ahí y te va llevando". Pues si el que está llevando a José Luis a luchar contra viento y marea contra todos. Si todos, porque aún me pregunto, si lo que hay que vencer es en la urnas es al adversario o a los proyectos de un pueblo que necesita salir a flote y ser de primera categoría como otros que tienen lo mejor.

"Échame una mano prima/que viene mi novio a verme". Ojalá Ana Mari, la concejala y su equipo que ha apostado por Pastori se hubieran dado cuenta en estos años de lo importante que es mantener el pueblo como una tacita y donde todos los jóvenes pudieran quedarse, y donde fuéramos la envidia de Andalucía. Todos cabemos, pero ni ella, se dio cuenta.

¿Será Pascual el Solari del Partido Popular de Carboneras? ¿De qué me culpas? Silencio, se rueda

Pascual guarda silencio. A Solari le han sacado la tarjeta roja. Florentino le cortó la cabeza y ha devuelto al Bernabéu al maestro Zidane. Me huelo que Pascual no atraviesa su mejor momento, son demasiadas camas que le han hecho y demasiadas veces que lo han mandado a callar cuando en alguna ocasión decidió tirar de la manta y reventar las presiones y las maneras de hacer política de sus amigos de GICAR, Salvador y Felipe. Ya no quiero hablar de su portavoz, quien lo ha dejado en alguna ocasión en evidencia, pero Pascual optaba por hacer sonar su autobombo para recocijo de sus amigos narcisistas que lo aplauden por las meteduras de pata que ha logrado hacer esta legislatura.

Sinceramente: como diría el cortador de césped: ¡qué malo es el ingeniero! que logra hacer política de barra. Durante estos años, Pascual ha desperdiciado mil millones de oportunidades de contar la verdad, y cada vez que se atrevió a hacerlo lo mandaron a callar los jeques que un día lo convencieron para que firmase un pacto por encima de ese corazón de carbonero que tiene.
Me temo que Pascual puede acabar como un equipo menor durante las próximas elecciones, porque está extenuado con el excesivo ritmo de un GICAR-PP que se desmonta y él calla.

Su silencio llama la atención. Y mira que nos hemos divertido esta legislatura. Entraba a cualquier trapo pero creo que está en baja forma.

Me parece ridículo que Salvador, su portavoz, le haya robado la cartera de Los Muertos. Ni ha aparecido por una foto. Él que cuando tenía un "oasis" salía a todo tren, que incluso cedió su primer sueldo para los más desfavorecidos. Nunca más lo hizo. Y lo peor que ni se sabe nada del Plan de Playas que le ha solicitado la asociación de hosteleros y comerciantes. Convencidos estamos que Felipe también le robara un protagonismo en la recta final. En el minuto 93, está perdiendo el partido. Y lo peor que será recordado como el concejal de Popeye, que confundió a un sicario con un actor.
Pascual no puede con las botas, porque lo han dejado siempre sin posibilidad de gol, a pierna cambiada. Él ha tragado y su ceguera ha sido tan grande que sólo se dedicó a decir clan al PSOE cuando estaba revuelto entre facturas de sus socios de Gobierno. Y no ha tenido los santos pantalones de levantar la mano, aunque en barra, dice todo lo que no es capaz de levantar con la mano en el sillón de los carboneros. Un actor secundario para una política que deja mucho que desear porque no será recordado por transparente ni por gritón, sino por seguidor y fans de sus socios de Gobierno a pesar de que su corazón no comulgue con lo que ha visto.