Se veía venir. Era una muerte anunciada. Si el alcalde Don Felipe tiró de la manta contando todas las presiones y presuntas irregularidades, la pelota ahora se la devolvieron sus compañeros de fila de GICAR. Andan las aguas revueltas, y ahora la concejala Maria Angeles Ruiz Venzal ha decidido poner en jaque a un equipo que está totalmente a la deriva y que ha sido denunciado en múltiples ocasiones por el PSOE por irregularidades y pagos.
Maria Ángeles, compañera de GICAR y de Felipe, ha solicitado al amparo de los artículos del Reglamento de Organización, Funcionamiento y Régimen Jurídico de Entidades locales, todas las facturas que obren en poder de los Servicios Municipales del Ayuntamiento a nombre del padre del alcalde en los últimos dos años.
Quizás la venganza se sirva en fría, pero desde luego las elecciones prometen y este movimiento de Maria Ángeles dice mucho de su gran poder y de no estar de acuerdo con muchas decisiones que se han tomado en la casa de todos los carboneros.
Los miles de euros se han arrimado a los que más quieren y de todos he sabido que el refrán "por el interés te quiero Andrés" se cumple de manera lamentable en contra de todos los bolsillos de la ciudadanía, una Carboneras que asiste con bastante incredulidad a lo que queda por venir.
La desgestión de este equipo puede llegar a un desastre sin precedentes, ahora habrá que esperar que es lo que hay detrás de este gran paso a falta de menos de 4 meses para la campaña electoral.
Felipe ya dejó en la orilla a su antecesor y líder de GICAR, Salvador, con perlas que poco más llaman la atención de una Fiscalía.
Dios mío la que han montado. Y mientras los deberes sin hacer, y el pueblo en el peor debacle, totalmente a la deriva por un equipo PP-GICAR que nunca se entendieron y sólo salvaron sus intereses en contra de los carboneros.
Una mujer ha decidido tirar de la manta.
