martes, 23 de mayo de 2017

Felipe se frota las manos, Pascual y Salvador tendrán que escuchar al viejo profesor Amat y Contreras anda celebrándolo por todo lo alto





El alcalde de Carboneras ya ha hecho sus primeras declaraciones y reitera que "nunca, nunca, nunca" tuvo la intención negar información a la oposición. Su equipo jurídico ya está buscando los pies al gato para recurrir una sentencia que podría abrir una cadena de juicios en el que se verían más de uno implicado. Es más, incluso algunos trabajadores del Ayuntamiento a quien de rebote les podrían haber lanzado una patata caliente. Por responsabilidad, Salvador tendría que dimitir ya que hasta su compañero de bancada celebraba hoy en el holding de la calle Sorbas una sentencia que lo deja en la estacada. Felipe se prepara para ocupar el sillón de una alcaldía que tendrá que dar el visto bueno el viejo profesor y líder del Partido Popular, Gabriel Amat que hace dos días volvió a ser reelegido. Sus compañeros de partido Pascual y Salvador tienen una papeleta bastante difícil de dar su apoyo a un equipo débil y frágil que puede verse sentado en el banquillo. Ya lo advertía Amérigo en los Plenos, que "sepáis que podéis incurrir en un delito", pero el Clan del Ariel sonreía y dejaban caer que "no les amenazase".

La responsabilidad política es saber cuando los intereses propios perjudican a los carboneros.

El Clan del Ariel está más que dividido, y hoy a más de uno les tiembla un futuro que puede ser un verdadero calvario jurídico.
Mientras Contreras, el youtuber de Carboneras, sigue con sus vídeos subiendo un tono que no beneficia el clima carbonero, celebra por todo lo alto una sentencia en el bar de La Frontera, deja ver sus fotos en facebook y su careo con otros ciudadanos anónimos de Carboneras.

Mientras las fiestas de San Antonio están a la vuelta de la esquina, los cacharricos asentados en pleno centro del pueblo que puede suscitar un aluvión de críticas y la vara de mando en las manos de un Salvador que tendrá que aguantar el pulso y la mirada de los carboneros en la esperada procesión de San Antonio. Mientras en el bando de los moros han abierto alguna brecha. Me temo que no es el mejor momento para un discurso en el Patio Andaluz, con la sombra agridulce que le espera a una corporación que ya está en entredicho y que levanta más de una ampolla en diferentes colectivos.

Viva San Antonio de Padua, viva los carboneros. Lo que sí tenemos es un pregonero de lujo que seguro que dejará el pabellón de todos los carboneros bien alto.


















No es de recibo desprestigiar a nuestros hijos: Paco Venzal puso un ejemplo en su libro. Trabajen o no en el Ayuntamiento, en España y en el extranjero, no hay que machacar sus horas de sueño perdidas por tener hoy unos estudios dignos y un trabajo que merecen






Anda el patio muy revuelto en Carboneras. La sentencia conocida a primera hora de la mañana contra el alcalde de Carboneras pone de manifiesto que las cosas no se están haciendo bien. Ahora habrá que saber qué pasa, quién es el próximo alcalde, si el Partido Popular seguirá apoyando a GICAR, y cómo se comportará la oposición, un PSOE valiente, con jóvenes a la cabeza, que han decidido tirar de la manta ante tanta ocultación de datos.

Pero me da lástima que hijos de Carboneras se vean insultados en las páginas de Facebook porque trabajan y muy bien, diferente es que no les gusten el color político para los que decidieron contratarle. Y me puedo referir con nombres y apellidos, pero los voy a obviar. Lo que está claro que en Carboneras todos tenemos que hacer un esfuerzo para no desprestigiar a aquellos con el esfuerzo de sus padres y sus años de dedicación a lo que más le gustaban hacen un precioso e importante trabajo. Tengo ahora mismo el Libro de Paco Venzal en mis manos, y es una lección de autoestima para un pueblo poder comprobar como los hijos e hijas de Carboneras están en puestos de trabajo en Carboneras, o bien en el Ayuntamiento, o en empresas por la provincia, o en colegios, o en institutos de investigación, no sólo en Andalucía, España y en el panorama internacional.
El talento de Carboneras se marcha, se escapa y sólo nos encontramos con la crítica y la humillación a nuestros hijos/as. Siento verdadera pena, y es así.

Diferente es que el Ayuntamiento no es el INEM, ni una empresa de trabajo temporal; y no todo el mundo puede acceder a un puesto de trabajo, porque no habría para todos, pero si podrían realizar bolsas de empleo con igualdad de oportunidades para todos. Lástima me dan las personas que reciben críticas mordaces. Todos son personas y todas tienen corazón. ¿o se les había olvidado alguno o alguna que son Dioses?

Paco Venzal se atrevió a poner sobre papel la labor de centenares de jóvenes que se buscan su vida como mejor pueden con sus estudios y dejando bien alto el pabellón de Carboneras por donde están.