viernes, 19 de junio de 2020
Mil gracias María Lage, José Hernández y Marina Esteban (y todos los que participaron en Moros y Cristianos): Cuando llenas de alma y luz la responsabilidad, salen historias extraordinariamente maravillosas, orgullo de vosotros, orgullo carbonero
Hace una semana veía la luz el pedazo vídeo de los Moros y Cristianos que este año, los carboneros tendrían la oportunidad de ver desde sus televisiones, ordenadores y móviles por culpa del COVID-19.
Hace unos días, nuestras playas daban la bienvenida a la temporada turística con una gran sorpresa llena de color, de luz, de pasión y de mucho amor por Carboneras (Gracias a Isabel, concejala de Playas por su fantástica idea de llamar a María para que nos dé una dosis de saber estar y de vestir nuestras playas con sus mejores ideas).
Leer el mensaje de gracias de María Lage es orgullo carbonero. Porque como bien dice ella la felicidad es una decisión que se toma cada día. Una mujer generosa en sus palabras, grande de corazón y de alma apasionada con un pueblo que le ha acogido. Después de dar las mil gracias a todos los que le han apoyado y han construido su proyecto, que da un toque muy personal al paraíso carbonero, agradece infinitamente al pueblo de Carboneras su extraordinaria ayuda. Dice así:
Y sobre todo gracias al pueblo de Carboneras que tan generosamente nos ha acogido a mi hija y a mí y nos demuestra su cariño. Me siento muy orgullosa de dejar una pequeña huella de mi corazón junto al mar en el ahora mi Pueblo Carboneras. En nosotros y nosotras y en los que vengan a disfrutar me he inspirado.
Cuando José Hernández Hernández (hombre siempre vinculado a los Moros y Cristianos) toma la decisión de organizar una representación de nuestros Moros y Cristianos de manera virtual este año con todos los contratiempos y la incertidumbre que acarrea la nueva situación sanitaria mundial tras el golpazo del COVID-19 junto con la concejala de Fiestas, Mariana Esteban, tienen un buen reto delante. Días de organización, días de ensayo, horas de esfuerzo, y horas de incertidumbre porque la situación era delicada, porque el nuevo escenario pedía prevención, pero había que hacer algo extraordinario para los carboneros que se habían quedado este año con lo que más amaban.
Gracias a José Hernández y a todos los participantes en los Moros y Cristianos por haber sido protagonistas de uno de los proyectos visuales más preciosos y espectaculares de los últimos años. Moros y Cristianos de película para unos carboneros que tuvieron la oportunidad de verlo desde sus casas y para miles de visitantes que a través de youtube tienen la suerte de poder ver un documental extraordinario realizado por una empresa provincial, en un castillo de ensueño y con gente que a pesar de los momentos de risa y nervios lo bordaron. El precio, ni ha llegado a 2.000 euros. Frente a los 800.000 euros que gastaban en fiestas de San Antonio GICAR-PP-Felipe casi un regalazo para todos los carboneros por todo su significado y por todo lo que rodea a estar con San Antonio y nuestros queridos Moros y Cristianos.
Gracias también a los que no estuvieron porque seguramente les hubiera encantado estar, pero por limitación de aforo... porque con San Antonio nadie arruga su corazón. Gracias también a los que se les invitaron y no quisieron, y los que no acudieron ni a la misa oficial, porque eso dice mucho porque atravesaron esa línea roja que nadie en la historia de Carboneras se ha atrevido a pasar ni tan siquiera de puntillas.
Nadie en la vida es un imprescindible. Por eso las palabras de María Lage emocionan. Dicen lo que más saben con el paso de los tiempos que es de ser bien nacido ser agradecido; y sí María nos ha dado una gran lección de humildad, humanidad, grandeza, nobleza y educación. Su pequeño Madiba está en cada tabla dice María, pero lo que está en cada letra, en cada color, en cada luz, en cada trazo, en cada línea es su gran responsabilidad con la vida y hacerla aún un poco más alegre y amable.
Bajar a la playa ahora tiene un nuevo sentido. Encontrarse con María. Frente a los comentarios ayer de Juan José Alferez invitando a los carboneros a salir de su zona de confort; de echar la culpa a los pescadores, de intentar crear un conflicto social y enfrentar a comerciantes con pescadores, con Ayuntamiento solo por interés económico y propio, hay personas como María, José, Antonio, María Jesús... que quieren sumar para que Carboneras sea más grande aunque sea con estas pequeñas cosas que nos dejó como diría Serrat en un rincón, en un papel o en un cajón para saborear esto que le llaman vida. Lo siento Juanjo, pero cuando se habla en nombre de Carboneras, hay que tener un poco ese alma libre de María, que grande María, que tía más grande, como diría Antonio Machado,
Caminante, son tus huellas
el camino y nada más;
Caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.
Al andar se hace el camino,
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar.
Caminante no hay camino
sino estelas en la mar.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario